Dato o Información: Esa es la cuestión!

Dato o Información

Día con día, cada uno de nosotros tenemos que librar batallas lo cual nos permite enfrentar nuevos derroteros. Resultando evidente que en todo momento es necesario tomar decisiones. Es por ello, que la toma de decisiones es un axioma natural en cada uno de los seres humanos.

La Toma de decisiones siempre ha sido el constante devenir en cada uno de nosotros, y consecuencia innegable de un cambio de estado en nuestra cualidad personal, en nuestra forma de pensar, de actuar, de sentir. Siendo el quid de nuestra existencia.

En muchas ocasiones tomar una decisión puede ser un simple acto reflejo. En muchas otras, puede ser un acto estrictamente deliberado, así también, puede distinguirse por un profundo raciocinio. Cualquiera que sea la condición, indudablemente, siempre llevará a la persona a experimentar una transición.

Por lo tanto surge para todos, la necesidad imperiosa de reducir la incertidumbre al máximo una vez que se ha tomado una decisión, puesto que nuestra acción nos habrá de situar frente a circunstancias que pueden resultar ser de manera parcial o totalmente irreconocibles. Luego entonces y con la venia de las circunstancias, se originan de manera espontánea los datos. Atendiendo a la Real Academia Española, la palabra dato proviene del latín datum. Que significa: Lo que se da. Sin embargo, de cualquier forma en la que uno se refiera: -“lo que ocurre” o, -“lo que se presenta” o, -“lo que sucede” siempre habrá de cobrar diferente relevancia, dependiendo totalmente de la afectación, pudiendo ser crítica o totalmente indiferente en cada uno de los individuos. En muchas ocasiones carecer de un dato puede hacer que el individuo padezca de quietud o sosiego y esta condición le lleve a experimentar una menguada posición ante las circunstancias. En otro contexto, ignorar la presencia de los datos puede hacer que el individuo desaproveche las oportunidades que pudieran surgir frente a los nuevos escenarios. 

Esto nos lleva a reflexionar que mientras el dato no tenga relevancia para cada uno de nosotros, éste no logrará trascender. Pudiendo quedar condenado a ser sepultado en el abismo de la subjetividad ordinaria. Sin embargo, cuando el dato logra cobrar importancia y transitar hacia la subjetividad particular, es entonces que se transforma en Información. Elemento vital que responde a una necesidad específica y permite habilitar la generación del Conocimiento. Cabe señalar que solamente aquella información que ha sido comprendida de una forma inteligente, o bien, de manera intuitiva por cada uno de los individuos. Es la que logra evolucionar hacia ese nuevo estado que ha de permitir elaborar los constructos que han de gobernar su accionar personal. Como refiere Rodriguez, P. U. (2008):

La epistemología schopenhaueriana nos fuerza a concluir, en primer lugar, que solo conocemos aquellos objetos que revisten algún tipo de provecho para nuestra voluntad y, en segundo lugar, que de éstos únicamente conocemos los aspectos que suscitan de modo más inmediato nuestro interés.

Bien describe el viejo adagio “El interés tiene pies” ojalá ese interés, fuera la bujía perenne en nuestro motor interno que permitiera de manera incansable contemplar el perpetuo acontecer de nuestro universo. Permitiendo elevar el grado de conciencia en cada uno de nosotros. Sin olvidar nunca jamás la importancia de lograr y mantener la armonía y el equilibrio perfecto entre el ente y el ser. Profundizar en la búsqueda continua de la verdad será el único camino para liberar al individuo de sus ataduras, logrando así que la Sabiduría aparezca en su camino.


Rodriguez, P.U. (2008) Arte, mundo y voluntad: Schopenhauer y Nietzsche. Enfermedad del mundo y redención artística [En línea]. VII Jornadas de Investigación en Filosofía, 10-12 de noviembre de 2008, La Plata. Disponible en: http://www.fuentesmemoria.fahce.unlp.edu.ar/trab_eventos/ev.498/ev.498.pdf